viernes, 18 de noviembre de 2022

EL QUE DIRÁN Y LAS DECISIONES DEL SISTEMA EDUCATIVO

Hace un par de años, mientras estaba por terminar mi paso por la secundaria, me encontraba en una complicada situación, que creo que todos o la gran mayoría pasó por lo mismo; test vocacionales, charlas, análisis del FODA, no sabía que seguir estudiando.


Dudé mucho tiempo que quería hacer, me llevó un año pensar y ponerme de acuerdo con mi cabeza. Estaba segura de que quería desafíos, pero no se si estaba preparada para ser testigo de la realidad desde otra perspectiva. Ingresé al Profesorado de Educación Especial. Sentí que como a Rosa del Río, se me abrió un nuevo mundo. Fueron las docentes las que lo abrieron, mostrando siempre la realidad, para entender TODO, desde los estudiantes y quienes intervienen en el ámbito educativo, y a los que no tanto.


Porque uno desde afuera se queja. Pone en tela de juicio el conocimiento de los docentes, juzga a la educación, se queja de los paros, y hasta de los contenidos. 

Recuerdo la revolución que se armó en mi pueblo cuando se empezó a dar Educación Sexual Integral en las escuelas. Al menos en la mía, no hubo padre que no se haya quejado. 


No me puedo olvidar de las clases, bueno… “charlas”, que nos daba algún docente, siempre muy por arriba, ¿quién iba a querer dar un contenido que sabía que iba a provocar una lluvia de quejas interminables de los padres?

Hoy por hoy, si que se puede decir que hemos derribado algún que otro TABÚ. Es indiscutible, la ESI es un derecho de todos y todas, niños, niñas, adolescentes y jóvenes.

Pero también es verdad, que podemos encontrarnos con gente que proclama “CON MIS HIJOS NO TE METAS”. Detrás de un discurso que acusa a los docentes de querer “pervertir” a los y las alumnos/as.


Familias sanjuaninas se reúnen para expresarse en contra de la Educación Sexual en las escuelas. “La educación sexual de los hijos la tenemos que brindar los padres, en todo caso nos podrían instruir a nosotros y nosotros decidir si es correcto o no, si es el momento o no para darles esta información a nuestros hijos”

También tengo muy presente cuando se empezaron a utilizar las tecnologías. Los dichos, las críticas. Que las docentes iban a perder el trabajo, siendo reemplazados por una máquina (que claro está, la pandemia dejó a la vista de todos que el docente es irremplazable, su rol más aún en los niveles inicial y primario, es de suma importancia para la formación de los alumnos), que los niños iban a involucionar, frenando la práctica educativa.


Al decir verdad, creo que se ha encontrado el momento justo para la búsqueda de estrategias que impulsen la riqueza de los procesos de enseñanza-aprendizaje. Fomentando el trabajo colaborativo, con impulsos desde el Estado como “CONECTAR IGUALDAD”. Se puede pensar una propuesta distinta de usar la tecnología, si se sostiene desde una pedagogía que abre caminos a la participación, a la producción, al trabajo colectivo, etc. Se deben generar espacios en donde los alumnos, en este caso, se sientan libres de expresarse, hacerlos más participativos, y darles lugar de poner en palabras sus críticas y sus opiniones.


Analía Cubino, Ministra de Educación de Tierra del Fuego, destacó que “enviar esta herramienta a todos nuestros estudiantes en sus primeros tres años del secundario es reconocer un derecho tan importante como el del acceso a una mejor educación”.


Volviendo a aquella reflexión de Rosa del Río, y a aquellos docentes que nos abrieron un nuevo mundo, debo decir que en estos dos años de formación docente, no escuché a ninguno decir que no nos animemos a lo nuevo. Todos nos impulsan a crear desde las tecnologías, a explotar y aprovechar las diversidades, a romper con la desigualdad. Que no nos quedemos con esa planificación vieja, la de siempre, bien estructurada. Entender que un mismo contenido puede darse de infinitas maneras. Y que no se trata de que los alumnos copien y peguen en sus carpetas los conceptos.


Tomando el ejemplo de las TIC, un estudio revela que quienes están entre los cinco países con la mejor educación, impulsada en gran parte por la tecnología, son Corea del Sur y Finlandia. Este último, tiene una gran aspiración por la igualdad, que brota del Estado y de los individuos. No hay distinción entre barrios, no hay riqueza ni pobreza que sobresalgan.

Es uno de los países pioneros en adaptarse a las nuevas necesidades de la sociedad del conocimiento, y uno de sus objetivos es ser ejemplo en el uso de las TIC para el mundo. 


Y creo que deberíamos tomarlo como tal. Seguir avanzando, y derribando tabúes. Romper con las desigualdades. Aspirar a innovar todo el tiempo. Brindar capacitaciones constantes a los docentes. Fortalecer la estimulación y atención temprana. Empeñarse en ofrecer estrategias usando las TIC. Abordando todo tipo de contenido, considerando los derechos de los estudiantes. 











































Bibliografía:


No hay comentarios:

Publicar un comentario